Tenía un caminar diferente, Nada sexy nada ardiente. Solo que andaba sonriente Disfrutando todo ambiente. Caminaba como loca desesperada la Lola, no tenía protocolo, caminaba y caminaba, siempre buscando aventuras. Cuantos años tienes abuela? Y dijo; tengo 82 y cumplo 92 el año entrante. Que marcha tan conservada, eléctrica y combinada que tienes a tu edad. Andas blindando esperanzas de seguirte a todo el que te mira andar. Cuáles son tus metas, qué sueñas, cuéntame tu historia, puedes ? Eso le pregunte mientras esperábamos el cañón. No quiero cerveza, mejor dame un café, eso dijo una vez. Me divertí mucho con esa oración, entonces pensé que había mucho que escuchar. Te respeto abuela, pero no escucharé tu decisión, compro café y cerveza a los dos y así esperamos el cañón. Abuela sonrío, y nos sentamos en una muralla antigua, no sé si de corales o piedras, ya estaba escuchando la abuela cuando intente pensar dónde estábamos sentado. Me contó de cuando vivía como hormiga busca
Acumulando versiones de mis sentimientos.